Cada 26 de julio se celebra en la Iglesia Católica la fiesta de los padres de la Santísima Virgen María: San Joaquín y Santa Ana.
Ambos son considerados los patronos de los abuelos, muy importantes para la familia. San Joaquín y Santa Ana educaron a María en la fe y el amor a Dios y la prepararon para su misión.
En la Parroquia de San Nicolás, a un lado y a otro del altar de la Capilla de la Santísima Virgen, se encuentran las imágenes de San Joaquín y Santa Ana con la Virgen niña, tallas del siglo XVIII realizadas en madera policromada, que fueron restaurados por la Parroquia recientemente y están expuestas a la veneración de los fieles.
En la Capilla de San Rafael encontramos la tabla extraordinaria que representa a Santa Ana, la Virgen y el Niño realizada por el pintor renacentista Yáñez de la Almedina, conocedor de la obra de Leonardo da Vinci.